lunes, 7 de febrero de 2011

Respeto.



No comment. Me encanta.
Niños a parte, también se puede pedir a los barítonos de turno que bajen la voz.
Salir a comer fuera o a cenar se convierte a menudo en un verdadero suplicio. Sales escopeteado con la sola fijación de llegar a casa y oír
"El silencio".

2 comentarios:

naná dijo...

me encanta!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
de hecho, debo decir que nos encanta!! lo hemos leido todas aquí en el despacho!! es genial!!!
gracias por compartirlo...
y que razón tienes, hay veces que salir se convierte en un suplicio...
muchos besos!!!

Josiane dijo...

Gracias a ti por entrar en el baúl de mis estados de ánimo.
Besos a todos.